Bacatá
era el centro de la tribu chibcha que se encontraba en estas tierras, para el
momento en que el conquistador español Gonzalo Jiménez de Quesada fundó la
ciudad, el 6 de agosto de 1538.
En
esta nueva ciudad, denominada Bogotá, se estableció el Virreinato de la Nueva
Granada en 1717. En 1819, Simón Bolívar se apoderó de ella y la designó como la
capital de La Gran Colombia (actualmente territorio de Colombia, Ecuador,
Panamá y Venezuela).
Fue
también la capital de La Nueva Granada (Colombia actual) cuando la Gran
Colombia se disolvió en 1830.
La
ciudad creció lentamente porque los bogotanos o "cachacos" deseaban
conservar su antigua cultura. Querían mucho su ciudad y cuidaban de sus iglesias,
conventos y casas construidas en estilo colonial español y de sus centros
educativos como el Colegio Mayor de San Bartolomé (1604), el Colegio Santo
Tomás de Aquino, (1608) el cual se convirtió en Universidad Santo Tomás (1639)
y el Colegio Mayor del Rosario (1653), entre otros.
Bogotá
ha sido llamada, desde hace muchísimo tiempo, "La Atenas
suramericana". Los bogotanos se enorgullecen de hablar el mejor y más puro
castellano del Nuevo Mundo.
Bogotá
se expandió rápidamente después de 1940, debido a la inmigración de la
población rural que llegaba a la ciudad en busca de mejores oportunidades
económicas.